Solemos estar familiarizados con los elementos químicos que más abundan o los que nos han resultado útiles: los que constituyen a los seres vivos y aquellos que tienen un valor económico (fierro, cobre, carbono, nitrógeno, oro, plata y muchos más). Pero si revisas la tabla periódica - que ordena los elementos existentes en el planeta según sus propiedades y estructura - encontrarás una serie de elementos con nombres extraños, de cuya existencia casi nunca se habla.
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"Raro" es un adjetivo empleado para calificar algo escaso o poco común, que se comporta en forma inhabitual o extravagante. De las tierras raras, no todos son escasas en la corteza terrestre, e incluso las hay que comparten la abundancia del oro y la plata, o del cobre y el zinc. Lo que sin duda es poco común y suena extravagante son sus nombres: neodimio, praseodimio, galosinio y disprosio... que parecen haber salido del Antiguo Calendario de Galván, que recopilaba los nombres más extraños del santoral cristiano.
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El 97% de las tierras raras proviene de la provincia de Mongolia Interior en China; se extrae muy poco en otras partes del mundo. China posee el 50% de las reservas mundiales de estos elementos y sus yacimientos son para este país lo que el petróleo ha sido para Arabia Saudita. Recientemente China anunció que limitará sus exportaciones de tierras raras, una medida que ha provocado una gran tensión con su principal cliente, Japón, que tendrá serios problemas en su industria electrónica. |
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Las tierras raras se encuentran dispersas en la corteza terrestre en cantidades insignificantes y son dos los minerales que las contienen en una mayor concentración: la monazita y la bastnasita. La monazita es un mineral café rojizo que contiene la mayoría de los metales de las tierras raras en forma de fosfatos; los que más abundan son los de cerio, lantano, praseodimio y neodimio. En la monazita casi siempre se encuentra también un fosfato de torio, un elemento altamente radioactivo que requiere costosos procesos especiales para su extracción metalúrgica a fin de que no se contaminen de radioactividad las aguas residuales que escapan de la mina. La bastnasita contiene los mismos elementos en forma de fluoruros, los más abundantes son lantano, cerio e itrio.
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